Se ha demostrado que la incorporación de ganado a hogares pobres en países en desarrollo como Zambia ha mejorado su situación financiera, sin embargo, no se ha estudiado qué efecto tiene en la nutrición la adición de leche y carne a la dieta. Una nueva investigación ha encontrado que añadir una pequeña cantidad de leche y carne a la dieta, mejora significativamente la obtención de nutrientes –específicamente proteínas, calcio, zinc, hierro, vitaminas A, B2, B12, y D.
El cambio de dieta en países subsaharianos
Durante las últimas décadas en Zambia, datos de la FAO, dependencia de la Organización de las Naciones Unidas, muestran que ha habido un decremento en el consumo per cápita de leche, carne y huevos, y un incremento en el consumo de tubérculos, en particular la mandioca.
Por consiguiente, la dieta es deficiente en vitaminas y minerales. Esto da como resultado un crecimiento raquítico y un desarrollo cerebral deficiente, una esperanza de vida menor, mayores tasas de mortalidad infantil, vulnerabilidad a enfermedades, e incapacidad de las madres para amamantar a sus hijos.
Investigadores de la Universidad de Illinois compararon cuatro escenarios alimenticios para comprender mejor las diferencias entre enfoques alimenticios discrepantes para ayudar a mejorar la nutrición de los pobres en países en desarrollo como Zambia.
“Comenzamos definiendo una dieta típica en Zambia utilizando datos del World Food Dietary Assessment System,” dice el economista de la Universidad de Illinois, Peter Goldsmith. “Es un programa que fue desarrollado principalmente para proyectos de investigación nutricional en países en desarrollo. Se establece una línea de base respecto a la disponibilidad de alimentos, no al consumo real.”
Debido a que aproximadamente durante los últimos 10 años, organizaciones de caridad han otorgado a los hogares de Zambia ganado, los investigadores estaban particularmente interesados en observar el rendimiento de alimentos de origen animal en comparación con dietas basadas en vegetales. Específicamente, el equipo de investigación estudió el efecto que tendría en los niveles nutrimentales de la dieta típica el añadir diferentes cantidades de leche y carne todos los días, en comparación con el incremento en el consumo de vegetales.
- El primer escenario añadía 18 onzas de leche entera de vaca todos los días a la dieta base.
- El segundo escenario añadía carne — 60 gramos de carne de res, 30 gramos de pollo, y 5 gramos de hígado de res. En conjunto, esto equivale a cerca de un quinto de libra de carne.
- El tercer escenario incluía tanto leche como carne.
- Y en el cuarto escenario, se añadía una mezcla alimenticia isocalórica (comparable en calorías con las otras tres) de alimentos vegetales disponibles en la región — mandioca, harina de maíz, trigo, batata, azúcar y aceites. El análisis se enfocó en cambios en los niveles de proteínas, calcio, zinc, hierro, vitaminas A, B2, B12, y D en la dieta.
Las cantidades nutricionales se basaron en cálculos conservadores de un hombre saludable de entre 19 y 50 años, con un peso de alrededor de 175 libras. Otros grupos como los niños y los adolescentes, o las madres lactantes tienen requerimientos diarios mucho mayores.
Los distintos escenarios en el cambio de dietas
“Al comparar los cuatro escenarios, el escenario que consideraba solamente la leche, incrementó el nivel de calcio a una probabilidad del 67% de ser adecuado. Hemos hallado que la dieta con una mayor cantidad de vegetales sólo elimina el riesgo de una deficiencia de vitamina A,” dice Goldsmith. “Sin embargo, el escenario de leche más carne incrementa todos los nutrientes esenciales al nivel alimenticio recomendado, con excepción del calcio, el cual tiene la probabilidad de ser adecuado en un 78%, y la vitamina D, la cual tiene la probabilidad de sólo ser adecuada en un 20%.”
Goldsmith dice que como economista quiere identificar la forma más eficiente de mejorar la nutrición. Por ejemplo, poner yodo en la sal es una forma muy eficaz de eliminar las deficiencias de este mineral, aunque hay muchos otros micronutrientes que considerar.
¿Qué elegir?: ¿Una dieta basada en la cultura local o nuevos alimentos ajenos a esas poblaciones?
“Nos preguntamos si hay formas económicas de lograr una dieta nutricionalmente más completa,” dice Goldsmith. “Aunque los alimentos de origen animal proporcionan una gran cantidad y variedad de nutrientes, la producción de ganado puede ser un sistema difícil de adoptar y administrar. Un país o un poblado, por ejemplo, podría no tener una tradición de cría de animales. Los granjeros podrían no tener la mano de obra para apacentar al ganado, suministros de agua adecuados, recursos para construir refugios para los animales, o acceso a pienso para estos últimos.
“Los datos de esta investigación son contundentes. No obstante, hay una razón por la cual el sistema de nutrición fijo está basado en vegetales. Es relativamente fácil de implementar. Ese es el dilema para la comunidad en desarrollo. ¿Te aferras a lo que es más culturalmente normal, como introducir arroz enriquecido, o introduces nuevos modelos que podrían a la larga ser más eficientes y proporcionar una mayor variedad de nutrientes a un menor costo por unidad? La adición de un poco de leche y huevos, por ejemplo, podría ser una forma eficiente de mejorar de simultáneamente las dietas con respecto a un número de áreas deficientes. También deberá tomarse en cuenta en el análisis, la comparación de los modelos en términos de sustentabilidad ambiental. Es claro que se necesitan más investigaciones para modelar y entender los pros y los contras de los diferentes enfoques para mejorar la suficiencia de los nutrientes”, dice Goldsmith.
Fecha: 10 de agosto de 2016
Fuente: sciencedaily.com
https://www.sciencedaily.com/releases/2016/08/160810180912.htm
«The importance of animal source foods for nutrient sufficiency in the developing world: The Zambia scenario» (“La importancia de los alimentos de origen animal para la suficiencia de nutrientes en el mundo en desarrollo: el escenario de Zambia”) está publicado en el Food and Nutrition Bulletin. Tiene como coautores a Zhiying Zhang, Peter Goldsmith, y Alex Winter-Nelson
Para más información, visite http://www.soybeaninnovationlab.illinois.edu
Fuente original:
Materiales proporcionados por el Colegio de Ciencias Agrícolas, del Consumidor y Ambientales de la Universidad de Illinois. Escrito originalmente por Debra Levey Larson. Nota: El contenido podría haber sido editado en estilo y extensión.
Referencia de la Publicación:
- Zhang, P. D. Goldsmith, A. Winter-Nelson. The Importance of Animal Source Foods for Nutrient Sufficiency in the Developing World: The Zambia Scenario. Food and Nutrition Bulletin, 2016; DOI: 10.1177/0379572116647823
Nota: Instituto Nutrigenómica no se hace responsable de las opiniones expresadas en el presente artículo.