Promete una reducción de los niveles superior al 30% y será mucho más barata que los nuevos tratamientos
Una de las condiciones más prevalentes en el mundo es el colesterol elevado o hipercolesterolemia. Sin tratamiento, puede provocar cardiopatías y accidentes cerebrovasculares, patologías que matan a 20,5 millones de personas al año en el mundo, según la Federación Mundial del Corazón. En España, en 2022, hubo un total de 120.572 fallecimientos -330 al día- por enfermedades cardiovasculares, lo que supuso un ligero aumento con respecto a años anteriores.
Ahora, una nueva vacuna, desarrollada por investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Nuevo México, podría cambiar las reglas del juego, al proporcionar un método barato para reducir el colesterol LDL «malo», que crea placas peligrosas que pueden obstruir los vasos sanguíneos. En un estudio reciente publicado en NPJ Vaccines, un equipo dirigido por el doctor Bryce Chackerian, catedrático del Departamento de Genética Molecular y Microbiología, informó de que las vacunas reducían el colesterol LDL casi con la misma eficacia- 30%- que un tipo de fármacos caros conocidos como inhibidores de PCSK9.
De hecho, el Ministerio de Sanidad aprobó el pasado 1 noviembre la financiación del primer medicamento de este tipo en nuestro país, inclisirán (Leqvio, por su nombre comercial), dirigido contra la proteína PCSK9, una molécula producida en el hígado que circula por el torrente sanguíneo y regula negativamente el metabolismo del colesterol LDL. El fármaco ha supuesto una revolución para el manejo del colesterol alto ya que proporciona una reducción eficaz y sostenida del 54% de pacientes con enfermedad cardiovascular aterosclerótica.
Aunque se le denomina erróneamente «vacuna» este fármaco es un anticuerpo monoclonal. Por su alto coste, la financiación se limita, por ahora, a aquellas personas en alto riesgo – porque ya han sufrido un infarto o un ictus- que, a pesar de seguir las directrices para regular sus niveles de colesterol, necesitan una solución adicional.
Una vacuna «real» y barata
Chackerian y su equipo buscaban una vacuna «real», dirigida específicamente contra la proteína PCSK9 que, teniendo resultados parecidos sobre el c-LDL que los citados fármacos, fuera más barata y accesible. «Nos interesa intentar desarrollar otro enfoque que sea menos costoso y más ampliamente aplicable, no solo en Estados Unidos, sino también en lugares que no tienen los recursos para permitirse estas terapias tan, tan caras», señaló, según recoge Ep. «Tratándose de una enfermedad con un impacto mundial tan profundo, cabría pensar que los tratamientos contra el colesterol alto serían más accesibles y asequibles», añadió.
Para conseguirlo, utilizaron la tecnología de la plataforma de vacunas de ARNm que desarrolló en la UNM, y se asociaron con investigadores de todo Estados Unidos para crear una nueva vacuna dirigida específicamente contra la PCSK9. «La vacuna se basa en una partícula vírica no infecciosa«, explica. «No es más que la envoltura de un virus, y resulta que podemos utilizar esa envoltura para desarrollar vacunas contra todo tipo de cosas diferentes«, detalló Chackerian.
En este caso, el experto explica que el mismo pegó trozos diminutos de la proteína PCSK9 a la superficie de estas partículas de virus. «Así, el sistema inmunitario produce una respuesta de anticuerpos realmente potente contra esta proteína que interviene en el control de los niveles de colesterol«, aclaró.
Impacto global
En los últimos 10 años, la vacuna se ha probado en ratones y monos con resultados prometedores. Chackerian dijo que el siguiente paso es encontrar financiación para pasar a la fabricación de la vacuna y los ensayos clínicos con humanos. Ese proceso puede llevar años y varios millones de dólares, pero merece la pena para desarrollar una vacuna que sea pura, segura y asequible.
«Se ha calculado que si todo el mundo se sometiera a una de estas terapias con inhibidores de la PCSK9, el sistema sanitario quebraría«, afirmó Chackerian. Calcula que su vacuna podría ser más barata que 100 dólares por dosis porque se fabrica con una bacteria sencilla y relativamente accesible. «Estamos pensando en decenas de dólares por dosis», apuntó, y cada dosis seguiría siendo eficaz durante cerca de un año. «Se trata de una vacuna que creemos que puede tener un impacto global. No solo en Estados Unidos, sino en todo el mundo, donde las cardiopatías son un problema importante». Chackerian ha asegurado que su equipo sigue trabajando duro para lograr ese impacto. «Esperamos tener una vacuna para la gente en los próximos 10 años».
Autora: MARTA DE ANDRÉS
Fecha: Madrid Creada: 24.12.2023 17:24
Última actualización: 24.12.2023 17:24
Fuente: larazon.es