Una nueva investigación ha hallado que las mujeres que llevan una dieta “mediterránea” durante los seis meses previos a un tratamiento de reproducción asistida tienen probabilidades considerablemente mayores de quedar encinta y dar a luz a un bebé vivo, que las mujeres que no llevan dicha dieta.
El estudio
Los investigadores preguntaron a un grupo de mujeres sobre su dieta antes de que se sometieran a un tratamiento de fertilización in vitro (IVF por sus siglas en inglés) y hallaron que las que comían más vegetales frescos, frutas, granos enteros, legumbres, pescado y aceite de oliva, y menos carne roja, tenían de 65% a 68% mayores probabilidades de lograr un embarazo y nacimiento exitosos en comparación con mujeres cuya dieta se ceñía menos a la dieta de tipo mediterráneo.
El estudio, publicado hoy (martes) en Human Reproduction, se centró en patrones alimenticios, en vez de nutrientes individuales, alimentos, o grupos de alimentos. Se evaluó la dieta de 244 mujeres mediante un cuestionario de frecuencia alimenticia al momento de alistarse en una unidad de concepción asistida en Atenas, Grecia, para su primer tratamiento de fertilización in vitro. El cuestionario les preguntaba qué tan a menudo comieron ciertos grupos de alimentos durante los seis meses anteriores; los resultados otorgaron a las mujeres una puntuación de Dieta Mediterránea (MedDiet Score), la cual iba de 0 a 55, donde las puntuaciones mayores indicaban mayor correspondencia con la dieta mediterránea. Las mujeres tenían entre 22 y 41 años y no eran obesas (índice de masa corporal de menos de 30 kg/m2).
Los investigadores, conducidos por el profesor adjunto Nikos Yiannakouris, del Departamento de Nutrición y Dietética de la Universidad Harokopio de Atenas, dividieron a las mujeres en tres grupos dependiendo de su Puntuación MedDiet: el primer grupo tenía puntuaciones entre 18 y 30; el segundo, entre 31 y 35; y el tercer grupo, entre 36 y 47.
Hallaron que en comparación con las 86 mujeres del grupo de más alta puntuación, las 79 mujeres del grupo de menor puntuación tenían tasas de embarazo (29% versus 50%) y nacimientos vivos (26.6% versus 48.8%) considerablemente menores. Cuando los investigadores estudiaron a las mujeres menores de 35 años, hallaron que cada mejora de cinco puntos en la puntuación MedDiet estaba relacionada con una probabilidad aproximadamente 2.7 veces mayor de lograr un embarazo y nacimiento exitosos.
A nivel global, 229 mujeres (93.9%) recibieron al menos un embrión en su útero, 138 (56%) tuvo una implantación exitosa; 104 (42.6%) logró un embarazo clínico (el que se puede confirmar por ultrasonido); y 99 (40.5%) dio a luz a un bebé vivo.
Conclusiones
“El mensaje importante de nuestro estudio es que se debería animar a las mujeres que intentan lograr la concepción, a llevar una dieta saludable, como la dieta mediterránea, ya que mientras más parecida sea la dieta que se lleva a este saludable patrón alimenticio, habrá mayores posibilidades de un embarazo y nacimiento exitosos,” dijo el Profesor Yiannakouris.
“Debería tenerse en cuenta que cuando se trata de concebir un bebé, la dieta y el estilo de vida son tan importantes para los hombres como para las mujeres. Un trabajo previo de nuestro grupo de investigación entre los colaboradores varones de nuestro estudio ha sugerido que llevar una dieta mediterránea también podría ayudar a mejorar la calidad del semen. En conjunto, estos hallazgos destacan la importancia de las influencias alimenticias y la calidad de la dieta en la fertilidad, y apoyan un papel favorable para la dieta mediterránea en los resultados de la reproducción asistida.”
Los investigadores no hallaron ninguna relación entre la dieta y la probabilidad de embarazos y nacimientos exitosos entre mujeres de 35 años y mayores. Sin embargo, creen que esto se debe a que los cambios hormonales, un menor número de óvulos disponibles y otros cambios que las mujeres experimentan a medida que envejecen, podrían enmascarar las influencias de los factores ambientales como la dieta.
El futuro
El Profesor Yiannakouris dijo: “El hecho de que en nuestro estudio un factor favorable de la dieta mediterránea era evidente sólo entre mujeres menores de 35 años, no significa que llevar una dieta saludable no sea importante para las mujeres mayores. Nuestros resultados sugieren la necesidad de investigaciones adicionales, no solo entre mujeres mayores, sino también entre mujeres con problemas de obesidad y en mujeres que logran concebir de manera natural.”
Los investigadores dicen que sus hallazgos no pueden ser generalizados a todas las mujeres que intentan quedar encinta, ni a mujeres obesas o mujeres que asisten a otras clínicas de infertilidad alrededor del mundo. Señalan que sus hallazgos demuestran que una dieta mediterránea únicamente está ligada a mejores resultados del tratamiento de fertilización in vitro y no pueden demostrar que genere mejores probabilidades de embarazo y nacimiento.
“Nuestros hallazgos dan soporte al hecho de que las parejas que se someten a un tratamiento de infertilidad podrían beneficiarse al llevar una dieta mediterránea (una dieta ampliamente aceptada por sus efectos positivos en la salud humana); sin embargo, se debe analizar en futuros estudios de intervención si las recomendaciones sobre llevar más rigurosamente una dieta de este tipo mejora los resultados de la reproducción asistida, o no. Por otra parte, nuestros resultados deberían ser explorados y confirmados en otras poblaciones al interior y más allá de la región mediterránea. Claramente, se necesitan más investigaciones y estudios de intervención para aclarar el papel de la calidad de la dieta en los resultados de la reproducción asistida, para revelar mecanismos subyacentes, para desarrollar pautas nutricionales para las mujeres para mejorar aun más los tratamientos de fertilidad y las tasas de éxito”.
“Puesto que más parejas alrededor del mundo se enfrentan a problemas de infertilidad y buscan acceso a tecnologías de reproducción asistida para lograr concebir, es esencial que reciban orientación sobre la importancia de las influencias alimenticias y adoptar un estilo de vida saludable,” concluyó el Profesor Yiannakouris.
Fecha: 29 de enero de 2018
Fuente: Sociedad Europea de Reproducción y Embriología Humana.
Link: https://www.sciencedaily.com/releases/2018/01/180129223846.htm
Fuente de la historia:
Materiales proporcionados por la Sociedad Europea de Reproducción y Embriología Humana. Nota: el contenido podría haber sido editado en estilo y extensión.
Referencias de la publicación:
Dimitrios Karayiannis, Meropi D Kontogianni, Christina Mendorou, Minas Mastrominas, Nikos Yiannakouris. Adherence to the Mediterranean diet and IVF success rate among non-obese women attempting fertility (Llevar una dieta mediterránea y la tasa de éxito la fertilización in vitro entre mujeres no obesas que buscan concebir). Human Reproduction, 2018; DOI: 10.1093/humrep/dey003
Dimitrios Karayiannis, Meropi D. Kontogianni, Christina Mendorou, Lygeri Douka, Minas Mastrominas, Nikos Yiannakouris. Association between adherence to the Mediterranean diet and semen quality parameters in male partners of couples attempting fertility (Relación entre el nivel de cercanía a la dieta mediterránea y los parámetros de la calidad del semen en hombres de parejas que buscan concebir). Human Reproduction, 2016; DOI: 10.1093/humrep/dew288
Nota: Instituto Nutrigenómica no se hace responsable de las opiniones expresadas en el presente artículo.