Pruebas de exposición prenatal al alcohol y problemas de salud relacionados.
Según un nuevo estudio, las madres que beben niveles moderados a altos de alcohol durante el embarazo pueden estar cambiando el ADN de sus bebés.
El estudio
Las madres que beben niveles moderados a altos de alcohol durante el embarazo pueden estar cambiando el ADN de sus bebés, según un estudio dirigido por la Universidad Rutgers.
«Nuestros hallazgos podrían facilitar la evaluación de la exposición prenatal al alcohol en niños, y permitir un diagnóstico e intervención tempranos que puedan ayudar a mejorar la vida de los niños», dijo el autor principal Dipak K. Sarkar, Profesor Distinguido y director del Programa Endocrino en el Departamento de Ciencias Animales de la Universidad de Rutgers-Nuevo Brunswick.
El estudio de Sarkar y un grupo de científicos en una Iniciativa de Colaboración sobre los Trastornos del Espectro Alcohólico Fetal se encuentra en la publicación científica Alcoholism: Clinical and Experimental Research.
A partir de la base de un estudio previo dirigido por Rutgers, que encontró que el consumo excesivo de alcohol puede desencadenar un cambio genético duradero en adultos, los investigadores buscaron cambios en el ADN inducidos por el alcohol en 30 mujeres embarazadas y 359 niños.
El alcohol y la genética
Encontraron cambios en dos genes: el POMC, que regula el sistema de respuesta al estrés; y el PER2, que influye en el reloj biológico del cuerpo, en mujeres que bebieron niveles moderados a altos de alcohol durante el embarazo y en niños que habían estado expuestos a esos niveles de alcohol en el útero.
Se considera consumo excesivo de alcohol para mujeres ingerir cuatro o más bebidas en al menos cinco ocasiones en un mes. El consumo moderado en mujeres es de aproximadamente tres bebidas por ocasión.
«Nuestra investigación podría ayudar a los científicos a identificar biomarcadores, que son indicadores medibles como genes o proteínas alterados, que predicen los riesgos de la exposición prenatal al alcohol», dijo Sarkar.
El futuro
Los trastornos del espectro alcohólico fetal pueden incluir discapacidades físicas o intelectuales, así como problemas de conducta y aprendizaje. Si bien no existe una cura, los servicios de tratamiento de intervención temprana pueden mejorar el desarrollo de un niño, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU., los cuales afirman que no se conoce una cantidad de alcohol que resulte segura de beber durante el embarazo.
El estudio también encontró que los bebés expuestos al alcohol en el útero, el cual pasa de la sangre de la madre a través del cordón umbilical, había aumentado los niveles de cortisol, una hormona del estrés potencialmente dañina que puede suprimir el sistema inmunitario y provocar problemas de salud continuos.
Fecha: 15 de agosto de 2019
Fuente: Universidad Rutgers
Link: https://www.sciencedaily.com/releases/2019/08/190815081313.htm
Fuente de la historia:
Materiales proporcionados por la Universidad Rutgers. Nota: El contenido podría haber sido editado en estilo y extensión.
Referencia de la publicación:
- Dipak K. Sarkar, Omkaram Gangisetty, Jeffrey R. Wozniak, Judith K. Eckerle, Michael K. Georgieff, Tatiana M. Foroud, Leah Wetherill, Wladimir Wertelecki, Christina D. Chambers, Edward Riley, Natalya Zymak ‐ Zakutnya, Lyubov Yevtushok. Cambios persistentes en los genes reguladores del estrés en mujeres embarazadas o niños con exposición prenatal al alcohol. Alcoholism: Clinical and Experimental Research, 2019; DOI: 10.1111 / acer.14148
Nota: Instituto Nutrigenómica no se hace responsable de las opiniones expresadas en el presente artículo.
